Poned fin al sueño que pesa con fuerza sobre vosotros, a partir del olvido que os llena de tinieblas, ¿Por qué perseguís la oscuridad, aunque la luz esté a vuestra disposición? La Sabiduría os llama y, pese a ello, vosotros deseáis la necedad, Un hombre necio sigue los caminos del deseo de toda pasión, Nada en los deseos de la vida y te irás a pique, Sois como un barco que el viento zarandea de un lado a otro y os quedáis anclados, que es lo mismo que decir estancados, o, sois como un caballo suelto que no tiene jinete, porque se necesita al jinete, porque es la razón antes que todo lo demás, Hablaré a los que sepan oír con los oídos de la mente, muchos han buscado la verdad y no han podido encontrarla; porque se han aferrado a las creencias de los fariseos y escribanos de la Ley, para nadie que esté bajo sus leyes pueda mirar la verdad, porque ellos no podrán servir a dos amos y el elevamiento espiritual es el deseo errante de los ángeles y las estrellas,
Conócete a ti mismo y encontrarás, aquél que busca que siga buscando hasta que encuentre, cuando encuentre, se turbará, cuando se turbe quedará asombrado y gobernará sobre todas las cosas, quien desee ser el mayor entre vosotros, que sea el servidor de todos, porque pasará este cielo y pasará asimismo el que está encima de él y los muertos no viven ya, y los que están vivos no morirán,
“No somos verdad, si de verdad no nos hacemos, porque buscar la verdad es hacer la voluntad de Dios-Padre” Cuando comíais lo que estaba muerto lo hacíais revivir; ¿qué vais a hacer cuando estéis en la luz? El día en que erais una misma cosa, os hicisteis dos; después de haberos hecho dos, ¿qué vais a hacer? ¿Cómo va a ser contado entre los sabios el que, después de estar andando por la senda que conduce a la vida futura, dirige sus pasos hacia la vida de este mundo?"
Mírate en el espejo de ti mismo, comienza a ser sincero contigo mismo, reconócete por tu valor y por tu valentía; conociéndote y amándote a ti mismo serás libre, “la verdad os hará libres” dice la palabra de Dios, y fuerte, porque tú mismo eres tu destino y nadie puede sustituirte en la reconstrucción de él, La tendencia a no reconocer la culpabilidad personal, siempre ha estado arraigada en la naturaleza humana, siempre estamos esquivando toda responsabilidad de nuestros propios actos y la verdad es que no nos conocemos a nosotros mismos y peor aún con las enseñanzas de que no es más que esta vida por la que tengo que responder, tu Padre Creador que te ama inconmensurablemente
Hermoso encuentro con nuestro creador, excelentes las meditaciones guiadas paso a paso llegamos a Dios .
ResponderEliminarGracias Jorge por siempre ser y estar, abrazos de luz divina
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